La transición energética se refiere a los cambios radicales en la forma de producir energía y transformar las fuentes de las que se obtiene. La idea engloba aspectos como el cambio climático, las políticas energéticas, los modelos productivos y el consumo y distribución.

Igualmente, la transición se relaciona con la sustitución de algunas fuentes energéticas por otras más productivas y menos contaminantes. Así se contempla, por ejemplo, el reemplazo de petróleo o el carbón por energía solar. Profundicemos en este concepto y su panorama en Colombia.

¿Cuáles son los aspectos más importantes de la transición energética?

Desde su creación, este cambio implica un beneficio directo para el medio ambiente. Esto se debe a que busca la reducción de la contaminación, de las emisiones de CO₂ o del efecto invernadero.

En este sentido, la transición persigue:

• Cambiar fuentes de energías comunes y no renovables por energías renovables.
• Eliminar elementos contaminantes que van al aire o al agua.
• El aumento del nivel de productividad de la mano de las nuevas tecnologías.
• Un acuerdo común entre los países, sobre todo entre los más afectados por la contaminación.
• Una fuente de competitividad, de empleo y desarrollo para los sectores industriales, empresariales y sociales.

¿Cuáles energías busca la transición energética?

Esta transformación implica mudarse hacia las energías alternativas. Estas se nutren de los nuevos sistemas productivos para brindar más y mejores rendimientos. Sus beneficios radican en que ya no es implícitamente necesario utilizar recursos no renovables para producir materia prima.

Estas fuentes energéticas se agrupan en seis sectores, a saber:

• Energía solar: se obtiene directamente del sol.
• Hidráulica: surge por el beneficio de las energías cinéticas o de corrientes de agua.
• Energía de los océanos: surte de las aguas del mar creando potencia en movimiento.
• La energía geotérmica: aprovecha las temperaturas elevadas de las zonas profundas de la Tierra.
• La eólica: aprovecha al viento y sus corrientes por medio de molinos y aerogeneradores.
• Energía de la biomasa: se obtiene de productos biodegradables y elementos orgánicos e inorgánicos, de origen animal y vegetal.

El futuro de la energía hidroeléctrica en Colombia

Cuando se piensa en la transición energética, indudablemente se debe considerar la energía hidroeléctrica. Las más de 90 centrales hidroeléctricas son la principal fuente de energía del país (Morales, 2022). Sin embargo, estas tienen un fuerte impacto ambiental.

Así, se evidencia que los cambios de los conceptos energéticos no solo involucran infraestructura y producción, sino también los esquemas funcionales. En otras palabras, cada central hidroeléctrica deberá corregir su impacto en el ambiente y en el entorno social.

En este sentido, el gobierno nacional tiene un gran interés en vincular a este sector en los procesos de transición energética. Igualmente, centrales y empresas del país han aceptado este nuevo concepto. De modo que, su implementación, aunque lenta, es prácticamente una realidad.

Evidentemente, este concepto beneficia al mundo, pero depende en gran medida de la aceptación global. Lo cual incluye no solo a industrias, empresarios y ejecutivos, sino también a los sectores ciudadanos y sociales.

Por ello, se hace necesario brindar información veraz, oportuna y dinámica al ciudadano. Es fundamental que cada persona conozca en profundidad sobre la transición energética, como aprovecharla y su aporte al planeta.

Referencias bibliográficas

• Morales, D. (2022). Este año, 84% de la energía ha sido de hidroeléctricas. Portafolio.