Instalación eléctrica: conoce sus partes y las averías más comunes
Una instalación eléctrica es una serie de circuitos, cuya función es conducir la energía eléctrica y distribuirla a los diferentes puntos de consumo. Existen varios tipos y cada uno cumple una función diferente en el transporte de la energía.
¿Cuáles son estos tipos y cuáles son sus particularidades? A continuación, respondemos esta interrogante. Además, te contaremos cuáles son los daños más comunes que se presentan en estas.
Tipos de instalación eléctrica
Antes de llegar a tu hogar, la energía pasa por diferentes instalaciones eléctricas con propósitos específicos. Estas se clasifican en dos grandes categorías, a saber, por tensión y por uso.
Instalaciones por tensión
Esta categoría se subdivide en dos tipos. Estos son:
- Alta tensión: instalaciones de gran potencia, con voltajes superiores a los 1000 voltios (1Kv).
- Baja tensión: instalaciones de uso doméstico y comercial, como las que encuentras en casa. Se mantienen entre 24V y 1000V. En Colombia, la mayoría de estas son de 110V con frecuencias de 60Hz.
Instalaciones por uso
Esta categoría clasifica los tipos de instalación eléctrica según su propósito. Las cuatro subcategorías son:
- Generadoras:las fuentes de energía y centrales donde se genera la energía eléctrica a partir de una fuerza electromotriz.
- Instalaciones de transporte: líneas que conectan las fuentes de energía principal con los trasformadores y receptores.
- Transformadoras: regulan los parámetros de la electricidad para la eficiencia energética. Es decir, varían y modifican su tensión para poder darle un uso posteriormente. En otras palabras, convierten la energía de alta tensión a voltajes seguros para su uso doméstico.
- Receptoras: las encargadas de distribuir la energía y enviarla de manera segura a los puntos de consumo en tu hogar.
Daños y seguridad en una instalación eléctrica
Por tu propia seguridad, la de tu hogar y la de quienes viven contigo, es fundamental conocer los riesgos de tener una instalación defectuosa o en mal estado. Además, debes saber la importancia de realizar su mantenimiento con personal capacitado y certificado.
Algunos de los daños más comunes en el hogar y sus riesgos son:
- Se produce cuando existe una mala conexión entre dos conductores, sea por tensión, polaridad o la consistencia de estos. Pueden generar daños graves a las instalaciones e incendios.
- Se produce cuando la instalación no es adecuada para recibir voltajes muy altos. A raíz de ello, pueden quemarse las instalaciones contiguas y dejarlas inutilizables.
- Pérdida de aislamiento. Las secciones encargadas de contener la energía se deterioran y electrifican su entorno. En consecuencia, hay peligro de recibir una descarga eléctrica y sufrir daños graves.
De estas averías decantan varios daños que ponen en riesgo la seguridad del hogar. Por ello, no debes repararlas ni hacerles mantenimiento tú mismo. Lo recomendable es dejar estas actividades al personal capacitado para verificar las condiciones de tu instalación eléctrica. Además, ten en cuenta que ellos contarán con las medidas de protección necesaria para garantizar su propia seguridad.